Expectación, abrazos y, sobre todo, caras de felicidad son lo que ha prevalecido en la sede de Vox de Valladolid desde antes de que terminara el escrutinio de los votos para estas elecciones del 28 de mayo. Con cánticos como "Irene, Irene..." y con banderas blancas y letras verdes recibían los apoderados de Vox a su candidata a la Alcaldía, Irene Carvajal. 

Con tres concejales y 18.738 votos, 8.043 más que en las anteriores elecciones, Vox de Valladolid se convierte en la mano de apoyo que permitirá al Partido Popular desalojar de la Alcaldía, tras ocho años en el Gobierno, al socialista Óscar Puente. 

El actual vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo, hacía la primera intervención tras los resultados, donde confirmaba el "crecimiento de Vox en toda Castilla y León". En esta noche de "gran alegría" y de "satisfacción enorme", tras una campaña "magnífica", el líder de este partido en la Comunidad aseguraba que "en Valladolid somos decisivos, y la siembra continúa". 

"Somos el partido que más crecemos en Castilla y León y, además, sumamos más de 200 concejales en las nueve provincias. Esto se ratifica en lo que sabíamos, que es que nos consolidamos como un partido en crecimiento en Castilla y León", avanzaba García-Gallardo, que añadía que "los ciudadanos han castigado las políticas del despilfarro, las políticas absurdas, de sus Zonas de Bajas Emisiones, de emergencias inexistentes".

Irene Carvajal, muy emocionada y agradecida, continuaba el discurso de Vox agradeciendo a los vallisoletanos, "que han hecho un ejercicio responsable y adulto de su derecho de voto. Han dicho: basta ya, queremos cambio. Nos lo decían en la calle, en los barrios, en cada esquina, en cada lugar de Valladolid".

Para Carvajal, los votantes de Vox son "nuestro gran valor", y ha agradecido a su equipo por ser personas "comprometidas y valientes". "Tenderemos la mano para desalojar al sanchismo, al socialismo y al comunismo del Ayuntamiento de Valladolid", decía. 

Respecto a los posibles pactos, la candidata de Vox no ha querido hablar de ellos. "Lo que sí que tenemos claro es que las urnas han hablado y nosotros les hemos escuchado. Tendemos la mano para ejercer ese cambio en Valladolid, con responsabilidad, profesionalidad y defendiendo las ideas y los valores con los que hemos inciado esta campaña. Queremos ciudar a los vallisoletanos", concluía Irene.