Ves la foto de María Gámez presentando su dimisión, con cuatro generales del cuerpo detrás, y con un sentimiento de extrañeza te preguntas ¿se deberá a un protocolo ya establecido? ¿se habrán ofrecido voluntariamente? ¿habrán sido presionados por el gobierno?, desde luego que, si su presencia ha sido debida a exigencias del gobierno, eso cuatro generales demuestran tener pocos güevos y, en todo caso, esa foto hace muchísimo mas daño a la Guardia Civil que la de Roldan en calzoncillos.

Llaman a María Gámez y familia los Aloe Vera porque, cuanto más tiempo pasa, más propiedades se les descubren, y eso que todavía la Agencia Tributaria no ha entregado sus datos, pertenecen a esa casta de políticos que han elegido la profesión para trabajar poco, vivir del estado y forrarse, casta, desgraciadamente bastante extendida y que evolucionan con el tiempo, como el Aloe, con el tiempo, Aloe Vera la casta entera.

La que han montado con el asunto de la gestación subrogada de Ana Obregón, como si fuera caso único, lo que son capaces de hacer para poner la bocina a toda potencia y así ocultar las críticas, los abucheos y los insultos. Lo de Ana, como asunto de prensa rosa vale, pero convertirlo en un asunto de estado, pero hombre, por dios, como si no se estuvieran cometiendo tropelías infinitamente mas gordas todos los días, hasta por el propio gobierno. Está claro que lo que se hace es echar carnaza a los buitres y maicito a las gallinitas, vienen elecciones y hay que tener a la fauna entretenida, alimentada y despistada.

Como cuestión biológica, se puede estimar la edad más adecuada para tener hijos entre los veinte y los treinta años, hay quien estirará ese periodo basándose en que hay quien madura a los quince y quien no lo hace a los cuarenta, también hay quien nunca madura, bueno tampoco vamos a ser excesivamente rígidos, pero tener nietos a los veinte es prácticamente imposible y a los treinta difícilmente, como lo que ha tenido Ana es una nieta, donde están las razones para que tanto hipócrita se haya rasgado las vestiduras y se hayan dicho tantas cosas, muchas barbaridades y algunas, las menos, razonables.

Otra cosa es que Ana se haya ido a USA para poner en práctica lo que aquí la ley prohíbe, hay que comprender que no le quedaba otra, pero, con el razonamiento de que lo que ha hecho aquí sería delito, no se puede negar la nacionalidad a un hijo de españoles nacido en el extranjero, si Ana inscribe a la niña en el registro como su nieta, hija póstuma de su hijo, hay que ser sumamente retorcido para poner algún impedimento. Otra cuestión es que se le puedan exigir responsabilidades y echar en cara que mercantilice su actuación, que sucederá, si es que no ha sucedido ya, y convierta en un negocio el cumplimiento del deseo, según dice, de su hijo, forrándose con exclusivas mientras a un común de los mortales le hubiera salido por un pico tener un hijo por gestación subrogada. Si Ana hace negocio con el nacimiento de su nieta también podemos considerarnos con el derecho de saber quien es la madre y quien aportó el óvulo y si se hizo por inseminación o mediante la implantación de un zigoto, que todo puede ser, una clonación, en este caso, no es, otra cosa es que hubiera sido niño, que hoy la ciencia consigue lo impensable, aunque no creo que hasta eso se hubiera atrevido. De todas formas, qué mas da cómo y dónde lo haya hecho, como si ya no hubiéramos visto de todo.

Oír a algunas ministras del gobierno despotricando y al resto del gobierno callando, pone una vez más de manifiesto su catadura. No creo que se atrevan a decir que la nieta no debe ser regularizada en España, aunque sí insinúan que no se lo merece, no la nieta, Ana. Gente que legisla contra natura ¿se atreverá a poner impedimentos? pues solo faltaba, cuando están concediendo la nacionalidad a todo kiski que simplemente diga que es descendiente de españoles. Los primeros que solicitarán la nacionalización serán los muertos de hambre, que saben que, si se vienen, nada mas llegar, disfrutarán de paguita a cargo de los trabajadores españoles, y todo por un puñado de votos que modifique el contenido de los pucheros, perdón, quería decir de las urnas, que es mas elegante, zorreando la democracia, que se les da de maravilla, al menos los caciques compraban los votos con su dinero.

Si a cualquier extranjero, por el simple hecho de decir que desciende de españoles, se le concede la nacionalidad ¿Cómo negársela a la nieta de Ana si con un análisis de ADN puede demostrar que es hija de un español?, mejor será que nacionalizar a quienes primero la solicitarán, que serán los pobres, también habrá ricos, pero esos no interesan, los ricos no votan al PSOE, aunque nos podría venir mejor. Si Andrés Manuel López Obrador solicitara la nacionalidad española, y si no la solicita se la podíamos aplicar honoris causa, así, quizá dejara de despotricar, ya que no se da cuenta de cuánto tiene por lo que callar, que ningún tataratatarabuelo mío, al menos que yo sepa, anduvo por aquellas tierras esclavizando y matando indígenas, algo que ni él, ni muchos como él, pueden decir, que si existen es porque los guardapuercos que acompañaron a Cortés al nuevo mundo, además de hacer perrerías a los pobladores autóctonos, también se beneficiaban a las pobladoras y hasta se casaban con ellas, pues bueno era D. Bartolomé de las Casas excomulgando. Si del polvo venimos y en polvo nos convertiremos, seguro que D. Andrés Manuel viene de algún polvo, de los que él llama genocidas, a una moza totonaca, tlaxcalteca, cholulteca o cualquier pobladora que pasara por allí, incluida alguna que otra súbdita de Moctezuma.