Olivia Baglivi: "Grabamos una escena en un bar de Valladolid y parecía que había estado más veces"

Meterse en camisa de once varas como dice mi abuela. Ese es el fiel reflejo del personaje de Erika (también llamada Violeta) que interpreta Olivia Baglivi (Madrid, 1995) en 'Memento Mori'. La actriz se mete de lleno en la piel de una joven hiperactiva que no le tiene miedo a nada... Ni siquiera a un asesino.

Su personaje, que empieza a coger forma con el transcurso de la historia, deja claro que el que no arriesga, no gana, como manifiestan sus continuos comportamientos. Baglivi analiza en una entrevista concedida a TRIBUNA cómo construyó a Erika desde el principio incluyendo tanto la lectura de guiones como la de la propia novela.

PREGUNTA: ¿Cómo surgió la posibilidad de formar parte de la serie?

RESPUESTA: Fue un proceso muy natural. Es decir, a través de un casting, como lo hago siempre. Tuve la suerte que en el único casting que hice estaba Yon y me lo vendieron como si tuviera que hacer una prueba de química con él... Maravilloso (ríe). Yon fue muy generoso conmigo. Me sentí como si fuera un ensayo. 

P: La serie está inspirada en la novela de César Pérez Gellida, que ha estado presente en los rodajes. ¿Cómo ha sido tener tan cerca al creador de la propia historia?

R: Contar con el germen que ha creado todos los personajes que encarnas y verle tan satisfecho... Ese es el verdadero premio. Es uno de los objetivos que tiene cada actor cuando se mete en la piel de otro. Al espectador tiene que parecerle creíble lo que está viendo. 

P: La serie no solo está grabada en Valladolid, sino también está plagada de muchas referencias a la misma. Por ejemplo, sale incluso el nombre de Las Viudas. Estos lugares, quizás, no lo conocían. ¿Ha tenido que recopilar información para meterse de lleno en ese 'ambiente vallisoletano' que rodea a 'Memento Mori'?

R: No porque la serie se encierra bastante en las localizaciones y respira donde estás en cada momento. El bar 'Zero', por ejemplo, no es cualquier bar. No tenía constancia de este bar, en concreto, pero parecía que había estado más veces. Ese es el ambiente que se respira de la novela y que se transmite en la serie. Es muy bello que sean localizaciones reales. 

P: Al hilo de la novela, ¿le sorprendió algo en concreto al leerla?

R: Bueno... primero leí los guiones y luego hice lo propio con la novela. Por lo tanto, estaba absolutamente condicionada para tratar de encontrar cosas de la novela que pudiesen sumar al personaje. Ya (con los guiones) era suficiente para construir a Erika. Es cierto que las presentaciones de los personajes me gustaron mucho en la novela, que te ayuda a indagar en ciertos asuntos que en lo audiovisual no te da tiempo. Creo que se respira la esencia de la misma. Por eso, César está tan contento. 

P: Es en Seminci donde se ha estrenado los dos primeros capítulos de la serie. ¿Qué opinión tiene del festival?

R: Me da respeto. Siento que es un festival muy poético. Podríamos haber ido a otros festivales, pero estrenar la serie en Valladolid, que es donde sucede la historia... ya solo por eso... Nos hemos sentido muy arropados. Es algo muy especial.

(Puedes leer la charla con Francisco Ortiz o con Yon González clicando en los enlaces).