El Real Valladolid cayó en Vallecas (2-1) ante un Rayo Vallecano que, sin cuajar una gran actuación, hizo cuanto quiso y sacó una victoria merecida que lo aúpa a los 46 puntos. Los pucelanos, por su parte, no fueron capaces de reaccionar y solo el tanto de Sergio León maquilló un resultado que pudo ser más abultado.

UNA PUESTA EN ESCENA DESCAFEINADA

El Pucela volvió a entrar bien en el encuentro, pero poco a poco se fue diluyendo de una manera surrealista, ya que ningún jugador demostró que era un partido de vida o muerte, que esa era la idea que quiso transmitir el propio Paulo Pezzolano en la previa. De hecho, el uruguayo tampoco estuvo tan intenso como prometía su carta de presentación.

No obstante, el Rayo, viendo que los pucelanos no lograban acertar con intentonas de por medio de Monchu o Escudero, dio un escaso paso hacia adelante que generó a su rival un nerviosismo y apatía que precipitaba a que Díaz de Mera pitara el final de la primera parte, aunque los cinco minutos de añadido terminaron siendo eternos para unos visitantes que se marchaban a los vestuarios como si los tres puntos no tuvieran importancia.

BOCHORNO

El descanso podría haber despertado al Pucela por las malas sensaciones que dio al término del primer acto. Sin embargo, nada más fuera de la realidad porque fue Raúl de Tomás el que abrió el marcador (1-0) con un cabezazo que batía a Masip tras un buen centro de Fran García. A partir de ahí, el partido no tuvo un dueño definido porque los de Iraola comenzaron a gustarse con algún detalle de calidad que alentaba a Vallecas. Fue tal bochorno que los aficionados rayistas no pasaron ni apuros. 

Dimitrievski ejerció de espectador de excepción, lo cual ya reflejaba la mala imagen de un Pucela abatido, desastroso y rozando el ridículo que consiguió alcanzar con el segundo tanto de los locales en una jugada que nace por un error en la entrega de Monchu. Los de Iraola aprovechaban el fallo y lanzaban una contra que acababa con el balón de Sergio Camello al fondo de la red (2-0). Solo el pundonor de Sergio León, el único que intentó revertir la situación en el terreno de juego, provocó una mínima esperanza blanquivioleta con un tanto (2-1) que quedó en anécdota después de la pasividad visitante durante la mayoría del partido.

Con este resultado, el equipo de Pezzolano suma la tercera derrota consecutiva y desaprovecha el colchón que tenía respecto al descenso, una zona que ve de cerca (un punto de ventaja) antes de afrontar los últimos cinco partidos de LaLiga Santander 2022/2023.