Se veía venir, pero no por esperado es menos celebrado. El UEMC Real Valladolid Baloncesto consiguió este sábado con su victoria (92-82) ante TAU Castelló el billete, de forma matemática, al playoff de ascenso a la ACB. Los de Paco García se han mantenido durante toda la temporada en dichos puestos, pero ahora ya es una realidad en una temporada llena de irregularidades fuera de Pisuerga que ahora está resolviendo con el mérito de solo haber perdido una solo vez en toda la campaña en casa. De hecho, el que salió vivo fue Andorra, líder en solitario de la LEB Oro y favorito para subir de categoría de manera directa.

BUENA PUESTA EN ESCENA CON REACCIÓN VISITANTE

Empezó 'desmelenado' el encuentro el equipo de Paco García. No pasaban ni los seis minutos de juego y un arrasador 21-9 reinaba en el electrónico. Sin embargo, qué poco dura la alegría en la casa del pobre porque TAU metió la directa con un preocupante parcial de 3-21 para los intereses locales. De hecho, el 24-30 reflejaba las primeras dudas pucelanas que fueron desaprovechadas por el combinado visitante tras un tiempo muerto obligado de García.

Los blanquivioletas, liderados por su capitán Sergio de la Fuente (el mejor del partido - 28 de valoración), se desatascaron, a pesar de la escasa aportación de jugadores importantes como Melwin Pantzar (3 puntos antes del descanso), Maj Kovacevic (mismo registro) y Mike Torres, que se fue camino a los vestuarios con cinco en su casillero. No obstante, la igualdad en el segundo cuarto no era suficiente para Castellón, que seguía por detrás en el marcador (38-35).

LOS TIRADORES LLAMAN A LA PUERTA

De los tres citados, fue solo Kovacevic (15 puntos en el tercer período) el que se echó el equipo a la espalda con Belemene y de la Fuente ejerciendo de 'guardaespaldas'. Ambos demostraron su poderío defensivo (sobre todo el primero) que provocaron a los aproximadamente 5.000 espectadores levantarse de sus asientos con la mente puesta en corear sus respectivos nombres, aunque no hacía falta este último detalle porque la fiesta continuaba en Pisuerga.

El parcial de 20-0 con el que se llegó al descanso animó a los de Paco García a subir una intensidad que se decaía con el paso de los minutos. Parecía que el conjunto local lo tenía todo controlado, pero Castellón se metió en la lucha por la victoria en el inicio del último período (63-60). La permisividad arbitral con muchas faltas sin sentido y el constante enfado de Paco desde el banquillo generaron un ápice de esperanza a los de Juan Orenga, que se lo empezaban a creer. 

Sin embargo, los locales activaron el 'modo playoff' y empezaron a aparecer los jugadores que no quería Castellón. Es decir, Pantzar y Torres. Ambos, que anotaron siete puntos en el tramo final del encuentro, catapultaron a los suyos hacia una victoria que se acabó certificando con el definitivo (92-82). Este triunfo es el vigésimo de la campaña para el UEMC, que iguala su récord y ahora, por ello, afronta las últimas tres jornadas con dos alicientes: superarlo y conseguir el 'factor campo' para la posterior lucha en el playoff de ascenso a la ACB.