Tordesillas recrea la llegada de la reina Juana I de Castilla

Durante casi medio siglo, el municipio fue testigo de su vida, sus desvelos y su legado, convirtiéndose en un lugar clave de la historia de España

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Tordesillas recrea la llegada de la reina Juana I de Castilla
Reina Juana I de Castilla. Ayuntamiento de Tordesillas.
Alejandro De Grado Viña
Alejandro De Grado Viña
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Tordesillas ha rendido, un año más, pleitesía a la reina Juana I de Castilla, la cual llegó al municipio en 1509, permitiendo a la villa que fuese testigo de su vida, sus desvelos y, sobre todo, su legado. Su presencia dejó una huella imborrable en las calles, cultura y memoria colectiva de Tordesillas, que ha mantenido viva la historia de la monarca y el papel del municipio vallisoletano desde entonces hasta ahora.

 

La comitiva estuvo compuesta por la propia soberana, interpretada por la joven Cristina Sigüenza Fradejas, y por su hija Catalina, a quien ha dado vida una pequeña de 5 años llamada Carmen González Morales, así como por su padre Fernando el Católico. Los tres han sido custodiados tanto por su guardia personal, los monteros de Espinosa, como por los monjes que transportaban el cuerpo de su esposo, Felipe el Hermoso, fallecido en Burgos, además de damas de compañía y personal de palacio.

 

El séquito de la reina partió a las 19.30 horas de la entrada de Tordesillas para encontrarse, sobre las 20.00, con el cortejo de su padre, Fernando el Católico, escoltado por su guardia. Desde allí, pusieron rumbo a la Plaza Mayor ante la expectación de los vecinos, asomados a sus balcones. Unos minutos más tarde, Hernando de Tovar, capitán de los monteros de Espinosa, ordenó abrir las puertas de la villa para dar paso a la reina. La comitiva regresó sobre las 20.30 horas a la Plaza Mayor, momento en el que Fernando el Católico trató de convencer a su hija de que se quedara en Tordesillas. Cuando llegó las 21.00 horas, la reina recordó sus vivencias más dolorosas y entró sola al Palacio Real, donde, sin saberlo, permaneció encerrada durante casi medio siglo.