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Valladolid entrega la Medalla de Honor a la Policía Nacional por su "compromiso con la ciudadanía"

La distinción se enmarca, además, en la conmemoración del segundo centenario de la creación del cuerpo

Entrega de la Medalla de Oro de Valladolid a la Policía Nacional. Fotos. Ical
Rebeca Pasalodos Pérez
Rebeca Pasalodos Pérez
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Valladolid entregó este sábado la Medalla de Oro a la Policía Nacional para reconocer el papel "crucial e indispensable para la democracia" que juega un cuerpo de seguridad que festeja, además, los dos siglos de su existencia así como la festividad de su patrón. 

En el acto de entrega, que se ha celebrado en la plaza Mayor vallisoletana ante la atenta mirada de cientos de ciudadanos, el alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero, fue quien calificó la concesión de la Medalla de Oro como "un acto de ciudad" por el "trabajo, compromiso y buen hacer" de los agentes, que posibilita que la Policía Nacional entre a formar parte en "un grupo selecto" al que pertenecen, entre otros, la Cámara de Comercio, la Academia de Caballería, el Servicio de Extinción de Incendios, Concha Velasco, Lola Herrera y José Jiménez Lozano.

Se trata de "una expresión de la cotidianeidad del sentir democrático en España" por conceder la medalla a un instituto de "índole nacional" desde el "respeto de lo local para hacer más grande lo general". Destacó asimismo Carnero el marco de celebración por ser "un espacio público" en el que fue proclamado rey de Castilla Fernando III el Santo hace 807 años y, posteriormente, de León, "base de la unificación" de la que hoy es comunidad autónoma.

Además, justificó la concesión de la medalla por la función de la Policía Nacional de "proteger el libre ejercicio de los derechos y libertades de los ciudadanos y su seguridad", que se acompaña de "el cariño que tienen la mayoría de los españoles por esta institución", que supone "un beneficio" para Valladolid por la "cercanía" de los agentes con los ciudadanos de la capital pucelana.

"Pero no es solo cuestión de cercanía y cariño, sino que trabajamos conjuntamente", señaló Carnero, lo que hace de Valladolid "una de las ciudades más seguras de España" a través de la labor de la Sala Conjunta, de la que destacó la atención a las víctimas de violencia de género.

Por último, Carnero quiso recordar a los agentes del cuerpo caídos por el terrorismo, especialmente de ETA, y defendió que "no vale el cambio de siglas para amparar la indignidad y la injusticia". "Deseo que la ley les permita hacer bien su trabajo para que Valladolid pueda seguir siendo una ciudad siempre segura", sentenció.

Medalla, símbolo de cariño y respeto

Previamente, el jefe superior de la Policía Nacional en Castilla y León, Juan Carlos Hernández, agradeció en nombre del cuerpo, "especialmente de las mujeres y hombres destinados en Valladolid", la concesión de la Medalla de Oro de la Ciudad al cuerpo, en un "marco incomparable" en el que compartió la "inmensa satisfacción y felicidad" de los agentes por compartir el Día de la Policía con los centenares de ciudadanos presentes en el acto.

"Es un día histórico para la Policía Nacional en esta ciudad", apuntó, al ser la entrega de la Medalla de Oro "símbolo del cariño y respeto" de la ciudadanía al cuerpo, e hizo extensivo el reconocimiento a todos los agentes de la Comunidad, que "demuestran día a día su enorme dedicación al trabajo que les toca realizar".

También aseguró que no esperaban la "acogida e innumerables reconocimientos" que está recibiendo la Policía Nacional en todo el país, "muestras de afecto que incrementan nuestra motivación y sentimiento de pertenencia" al cuerpo. "Nos sentimos orgullosos de ser policías nacionales", aseguró, tras dos siglos en los que la Policía Nacional "ha ido atesorando valores y principios que constituyen la senda de su identidad, como el respeto máximo a la ley, el espíritu de sacrificio y la abnegada vocación de servicio", así como "la profesionalidad y la lealtad".

Destacó la evolución del cuerpo durante estos dos siglos "al ritmo que la sociedad nos ha puesto, para satisfacer las demandas de los ciudadanos" y alcanzar así "las mayores cuotas de calidad en el servicio", como demuestra la integración de la mujer en la Policía Nacional hasta alcanzar el 20 por ciento de sus miembros o la promoción de la cooperación internacional en la lucha contra la delincuencia, entre otros avances.

Por último, destacó el papel "crucial e indispensable" de la Policía Nacional en defensa de la democracia, ya que el cuerpo "sabe y sabrá estar en su sitio para afrontar los grandes desafíos actuales y venideros" que amenazan la seguridad ciudadana, como "el terrorismo, la delincuencia organizada y los intentos de vulnerar la legalidad", mientras se protegen "los segmentos más vulnerables de nuestra sociedad".

Acto solemne

Tres minutos pasaban de las 12.30 horas cuando comenzó el acto institucional. Un total de 146 agentes formaron este sábado en el ágora pucelana en representación de todas las comisarías provinciales de la Policía Nacional en Castilla y León, así como de las unidades especiales del cuerpo que tienen equipo en la Comunidad, bajo la atenta mirada de centenares de vallisoletanos apostados en las gradas colocadas junto al Ayuntamiento y tras las vallas que rodeaban todo el espacio central de la plaza.

La interpretación del himno de España precedió a la entrada en escena del delegado del Gobierno en Castilla y León, Nicanor Sen, y del jefe superior de la Policía Nacional en la Comunidad, Juan Carlos Hernández, que hizo entrega del bastón de mando al delegado para que presidiera el acto y pasara revista a la formación de los agentes allí presentes.

Tras ello, Sen pronunció un breve discurso en el que apuntó que el presente año está "cargado de ilusión y celebraciones" por el 200 aniversario de la Policía Nacional, y agradeció a todas las instituciones y personas su colaboración con el día a día de trabajo de los agentes.

Posteriormente, y ya en la tribuna presidencial, se colocaron junto al delegado y al jefe superior de la Policía Nacional en la Comunidad tanto el alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero, como el subdelegado del Gobierno en la provincia, Jacinto Canales, para proceder a la entrega de la Medalla de Oro de la Ciudad al cuerpo.

Entre los méritos destacados para la concesión, se sitúan, según el acuerdo de la Corporación municipal, su papel de "salvaguarda de los más altos bienes jurídicos, derechos y libertades y la seguridad ciudadana", así como su "ejemplar desempeño" que le ha granjeado una "alta valoración" por parte de los ciudadanos. La entrega fue realizada por el alcalde, que dio el diploma acreditativo e impulso la corbata conmemorativa de la Medalla de Oro de la Ciudad al jefe superior de la Policía Nacional en Castilla y León. El acto concluyó con la entrega de las medallas y reconocimientos al mérito civil.