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La Marquesina se reducirá a 14 puestos y ampliará la venta a otros alimentos

El Ayuntamiento prepara un pliego para nuevas licitaciones que tendrán que solicitar tanto los aspirantes a un nuevo puesto como los vendedores que permanecen actualmente

Situación actual del Mercado de la Marquesina. Fotos: Sergio Borja
Rebeca Pasalodos Pérez
Rebeca Pasalodos Pérez
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Cada vez hay menos frutas y verduras frescas en el Mercado de la Marquesina de Valladolid. Mucho ha llovido desde que en 1997 empezó a funcionar este mercado al aire libre con 24 puestos de verduras, hortalizas y frutas frescas que ha mantenido la esencia de los mercados tradicionales donde los propios productores hacían llegar sus productos a los consumidores.

En la actualidad, solo ocho puestos mantienen su actividad en la Plaza España, en un mercado que agoniza. Son tres las razones que explican las causas del agotamiento de este mercado: la normativa vigente, que impide la cesión o traspaso de los puestos; la falta de nuevas licitaciones en los últimos años, y la extinción de las licencias de los puestos que aún quedan, que se produjo en 2012, lo que sitúa a los vendedores de la Plaza España en una situación de irregularidad.   

De padres a hijos. Así es como se transfieren los puestos según el Reglamento Municipal del Mercado Especial de la Marquesina de la Plaza España, publicada el 19 de agosto de 1997. El artículo 9 de esta normativa especifica: "Está prohibido realizar cesiones y traspasos de la titularidad de los puestos, excepto en casos de enfermedad, jubilación o defunción del titular y sólo a familiares de primer grado del mismo. En los supuestos de pérdida de la titularidad de los puestos, éstos quedarán a disposición del Ayuntamiento". Una limitación que ha supuesto que, en muchos casos, aquellos propietarios de los puestos que se han jubilado hayan cerrado definitivamente por falta de continuidad familiar del mismo.

Vacantes que no se cubren. Efectivamente, el hecho de que muchos puestos haya cerrado ha dejado muchos espacios vacíos, pero coincide, además, que en todos estos años no han salido a licitación nuevas licencias, por lo que no ha habido posibilidad de mantener el apogeo inicial de esta zona de venta.

Licencias caducadas. A lo anterior, hay que sumar que los ocho puestos que quedan tienen la licencia caducada desde 2012, también a causa de la propia norma municipal, que en su artículo 8 indica: "La autorización se otorgará por un plazo máximo de diez años. Concluida la autorización se podrá conceder una prórroga de cinco años, previa solicitud del titular".

Tres extremos que confirma el concejal de Comercio, Mercados y Consumo, Víctor Martín: "Ese mercado empezó a funcionar en 1997. Tenían 10 años de licencia más otra prórroga de cinco años, total que a partir de 2012, en realidad, llevan que se les ha acabado la autorización. Entonces, se han ido jubilando, no ha habido licitaciones nuevas. No se han sacado licitaciones y por eso los puestos se han ido vaciando. Algunos que se han marchado, otros se han jubilado pero sus herederos no han querido seguir con el puesto. Ese es el motivo por el que los puestos se han ido vaciando".

El Ayuntamiento planea nuevas licitaciones

Para abordar esta problemática, el equipo de gobierno prepara un pliego para sacar a licitación nuevas licencias, tal y como ha confirmado el edil a TRIBUNA. "Vamos a sacar ahora un pliego para hacer una nueva licitación. Está muy avanzado está en asesoría jurídica, afirma. "Estamos esperando a que la asesoría jurídica nos devuelva su informe y su análisis y, si todo está correcto, sacamos el proceso de licitación", confirma.

En más detalle, Martín explica que, según el pliego, "se van a reducir el número de puestos". "Inicialmente este mercado estaba preparado para 24 puestos y nosotros lo vamos a reducir a 14 puestos, más grandes y más en la línea de lo que queda ahora, que -apunta- están ocupando más espacio del que inicialmente tenían", desgrana.

Además, siempre que el informe de la asesoría jurídica lo considere viable, la idea del nuevo equipo de gobierno es "abrirlo a algún tipo de venta más, como pueden ser legumbres o alimentación para mascotas". La idea es "dedicar algún puesto a otro tipo de usos para que se ofrezca oferta más variada y dar pie a que se complete el aforo del mercado, siempre guardando la esencia del mercado, que es la venta de frutas y verduras y hortalizas frescas", añade el concejal.

Con respecto a los vendedores que aún mantienen sus puestos, Víctor Martín anticipa que una vez aprobado el plazo, "deberán pasar ellos también por el proceso de licitación" cuando llegue el momento, al igual que todo el que quiera tener un puesto en el Mercado de la Marquesina, ya que "no hay un derecho adquirido por el que puedas darles a ellos directamente por llevar más años ahí". Si bien, Martín asegura que ellos tienen "experiencia en venta al aire libre y en el sector de la venta de frutas y hortalizas" y estas cuestiones "se valorarían en el pliego si es que la asesoría jurídica lo valida". "Pero -insiste- no se puede reconocer el derecho de la renovación de la licitación porque no se puede pasar por encima de la ley", en referencia a la Ley de patrimonio de las administraciones públicas.

Plazos

Si todo va como espera y la asesoría jurídica contesta favorablemente, el concejal calcula que se podría tener preparado el nuevo pliego antes de que acabe el invierno. "Si nos responde en el plazo de unas semanas, ya lo podemos sacar. Luego habrá un periodo de solicitudes, después está el estudio de las mismas, la publicación, el periodo de alegaciones, etc. Por lo que ya nos en primavera podría estar abierto y los puestos operativos", afirma.