Asfalto frío en el Albert Park de Melbourne, 21 grados, apenas la mitad de los 35-40 a los que estamos acostumbrados. Amenaza de lluvia al 90%, nubes sombrías, pero empezamos sin agua. En estas condiciones el circuito se vuelve traicionero y eso hemos visto desde el principio. Salían enseguida los pilotos que se juegan la vida ya desde la Q1, esos equipos que luego en carrera, en un buen día, luchan por conseguir algún escuálido punto. El primer susto del día lo protagonizaba Logan Sargent que en la curva 16 piso la hierba haciendo un trompo, sin más. Y ahí llegó la primera sorpresa de verdad, en forma de bandera roja por una salida de pista de Checo Pérez. El mexicano se salió en la curva 3 acabando en la grava que lo engulló después de un bloqueo de las ruedas delanteras. Ya habíamos visto muchos problemas para el mexicano en los libres 3 y se confirmaba lo peor, saldrá último, no veremos pelea fratricida entre los Red Bull mañana, un problema menos para Verstappen. Se quejó el mexicano reiterada y amargamente de que el equipo no había corregido lo que les había pedido. ¿Boicot desde dentro?. Le acompañaron en la zona de eliminación los Alfa Romeo, el favorito local Oscar Piastri y el rookie Sargent.

En la Q2 se empezaron a desperezar los gladiadores y se empezó a ver que no estaría Alonso solo en la batalla por esa segunda posición que permite salir desde primera linea junto al previsible póleman. Los Ferrari demostraban que a una vuelta pueden estar ahí, al igual que los Mercedes, Stroll tampoco se quedaba atrás. Mientras, Verstappen a lo suyo, y crono tras crono se ponía primero y mejoraba su tiempo. Estuvo muy apretado por la zona de eliminación, para finalmente quedarse fuera Nick De Vries, Magnussen, Norris, Tsunoda y Ocón. ¡El francés por 7 milésimas!. La otra cara de la moneda fueron Albon, Hulkenberg y Gasly que pasaron a Q3, especialmente bien el alemán. Estos tres pilotos acompañarían a Verstappen, los Aston, los Ferrari y los Mercedes, en el duelo final de esta clasificación.

La amenaza de lluvia persistía en el horizonte cuando arrancó la Q3. Todos salieron a cuchillo como se vio enseguida. Tras el primer intento teníamos a los cinco primeros en una décima y media. Verstappen primero, con Hamilton pegado a 9 milésimas, Alonso a 41 y Russell a 86, tres pilotos en menos de una décima de segundo, menudo espectáculo, como me gusta este deporte. Pero al holandés no le gusta especular y dijo basta, y en su último intento hizo un estratosférico 1:16.732, y le metió 0.236 a Russell que saldrá segundo y 0.372 a Hamilton que saldrá tercero. Bien los Mercedes. El nano Fernando saldrá cuarto desde segunda linea pero por la parte sucia por 35 milésimas respecto a Lewis. Sainz acabó quinto tras un mal primer sector, le acompañará Stroll en esa tercera linea y tendrá que tener cuidado con su compañero Leclerc, que seguro que no está muy contento de salirdetrás suyo.

Mañana será otro día, esperemos que llueva, la qualy es una cosa y la carrera es otra muy diferente. Los de arriba están todos en un pañuelo, ya veremos que pasa mañana, lo único que es seguro es que todos venderán cara la posición desde un inicio. La salida será un espectáculo, no se la pierdan.