Esta es la estrategia de la ONCE para evitar la adicción al juego

El 17 de febrero se celebra el Día Internacional del Juego Responsable. Desde la ONCE, han desarrollado un plan 'Juego Responsable' con el objetivo de evitar problemas de ludopatía a los jugadores.

Ismael Pérez, delegado territorial de la ONCE en Castilla y León, detalla para Tribuna de Valladolid las características del 'Plan de Juego Responsable'. La asociación ha recibido cuatro veces el certificado de juego responsable emitido por la Asociación Europea de Loterías (EL). La última vez  fue 2022 y simboliza el buen hacer de la ONCE en materia de prevención. "Fuimos el primer operador público en conseguir ese certificado internacional de baterías europeas", explica Ismael.

La empresa de loterías hace especial hincapié en formar a los empleados de sus administraciones sobre los programas de juego responsable. "Formamos a toda nuestra gente de la ONCE que tiene relación con el juego, tanto los que están en las oficinas de cara al público como a los vendedores, para que hagan cumplir las normas del juego responsable". Desde su página web, la ONCE remarca la importancia de reforzar los elementos formativos de manera continuada a lo largo del año.

El diseño de los juegos también se planifica teniendo en cuenta el potencial del riesgo que pueda tener para los consumidores. La ONCE supervisa los boletos y, en caso de contar con altos porcentajes de peligrosidad, la asociación modifica su diseño para alcanzar cuotas correctas. "Desde el propio diseño de los juegos, aplicamos criterios que no inviten al consumo compulsivo de esos juegos. Se intenta que la gente disfrute jugando, pero que no conviertan su vida en un juego, que eso es importante", detalla.

La publicidad de las loterías también se hace pensando en la población vulnerable. La ONCE ha adoptado un código regulador que asegura unas estrategias comerciales que no fomenten el juego excesivo. La asociación busca no fomentar falsas probabilidades de ganar con su publicidad. "Aplicamos normas en la publicidad. A la hora de diseñar, tenemos que hacerla de una manera que invite al consumo responsable, además de decir en la propia publicidad que la gente ha de jugar de manera responsable", explica.

Dentro de la población vulnerable, los menores son un posible peligro para un grupo expuesto a una publicidad agresiva desde otros ámbitos del juego. Desde la ONCE, se han implantado medidas específicas de protección a los menores de 18 años. "Lo aplicamos en todos los ámbitos de la casa, en el ámbito comercial y en la comunicación, afirma. A nivel legislativo, los juegos públicos cuentan con una denominación especial dentro de la Ley de Juego."Los juegos públicos (Lotería Nacional y ONCE) están en la Ley de Juego denominadas de una manera específica, porque están diseñadas de una manera especial", comenta.

A pesar de los esfuerzos, siempre hay gente que sufre problemas relacionados con el abuso del juego. La ONCE pone a disposición de los clientes la posibilidad de autoexcluirse temporalmente de los productos de lotería. Los adscritos a esta medida no podrán hacer depósitos. El interesado en inscribirse en esta lista no podrá activar su cuenta en al ONCE hasta seis meses después de la autoexclusión. Sin embargo, Pérez explica cómo los ciudadanos, en este sentido, que llegan a la ONCE piden su expulsión. "En Castilla y León que hayan venido, hay tres personas de los 2.5000.000 que están inscritas. Eso no quiere decir que no haya gente, pero es de manera testimonial", manifiesta.

El delegado insiste, por último, en que existen otros sectores dentro del juego que son el verdadero peligro para los ciudadanos. "En los juegos públicos, la incidencia de ludopatía es muy baja porque no son juegos que inviten al consumo compulsivo de forma general. Donde de verdad hay un flujo de  personas  que están llegando a las asociaciones de jugadores rehabilitados con problemas es en el ámbito de las apuestas en Internet como, por ejemplo, las casas de apuestas, juegos online, póker, apuestas deportivas...", contextualiza. Asimismo, el anonimato de la red aumenta las probabilidades de caer en la adicción."La adicción al juego es generalmente vergonzosa", concluye Ismael.