El conjunto pucelano dominó el encuentro controlando todas las fases del juego
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El Atlético Valladolid se llevó un valioso triunfo del David Santamaría, consolidándose en la parte alta de la Liga Plenitude tras imponerse al Impulse BM Guadalajara. Desde el pitido inicial, el conjunto pucelano marcó el ritmo del partido gracias a una férrea defensa y una destacada actuación en portería, permitiendo solo 24 goles en contra. Además, la inspiración ofensiva de Gustavo Oliveira fue clave para asegurar la victoria sin demasiados sobresaltos.
Con este resultado, los gladiadores azules lograron su segundo triunfo a domicilio en la temporada, alcanzando la barrera de los 20 puntos en la clasificación. Desde el inicio, mostraron solidez en todas sus líneas y controlaron el encuentro con un planteamiento eficaz basado en el equilibrio defensivo y la efectividad en ataque. Los goles del lateral portugués Gustavo Oliveira resultaron determinantes para mantener la ventaja en momentos clave.
La defensa y la portería del conjunto pucelano marcaron la diferencia en los primeros compases del encuentro. Los de Pisonero ampliaron su ventaja progresivamente hasta el minuto 14, cuando el marcador reflejaba un contundente 4-11. La combinación entre Bar bajo los palos y Oliveira en ataque impulsó a los vallisoletanos, aunque el Guadalajara reaccionó con un parcial de 3-1, aprovechando un tramo de cuatro minutos sin goles del Atlético. Sin embargo, los visitantes supieron gestionar la situación y mantuvieron el control del juego.
El equipo de Juan Carlos Requena no bajó los brazos y apostó por defensas más abiertas, con un inspirado Nico García bajo palos, quien reemplazó al ex pucelano Gerard Forns en la primera vuelta. No obstante, la profundidad de banquillo del Recoletas permitió que el nivel de juego no decayera. Fran de Fuentes y Alejandro Pisonero aportaron en ataque, mientras que la zaga, liderada por el recuperado Lucas Ribeiro y Gedo, se mostró infranqueable. Esto permitió al Recoletas distanciarse hasta los ocho goles (9-17, min. 24), abriendo una brecha considerable en el marcador.
Cuando el partido parecía sentenciado, el Guadalajara encontró en Gorostidi a su líder ofensivo. Tres goles consecutivos del lateral redujeron la diferencia antes del descanso, aunque un tanto de Pisonero permitió a los pucelanos marcharse al vestuario con una ventaja de siete goles (12-19).
En la segunda mitad, los porteros de ambos equipos brillaron con intervenciones clave. Juan Bar frenó los intentos del conjunto alcarreño, mientras que Nico García evitó que el Recoletas ampliara aún más su ventaja, deteniendo varios lanzamientos desde los siete metros. A pesar de ello, los vallisoletanos aprovecharon las recuperaciones defensivas y los errores del Guadalajara para castigar con rápidos contragolpes finalizados por Camino y D’Antino desde los extremos.
El dominio pucelano se consolidó a falta de diez minutos para el final, cuando alcanzaron su máxima ventaja del partido (15-25), dejando la victoria prácticamente asegurada. Sin embargo, el Guadalajara no se rindió y, liderado por Catalina Falcón, logró un parcial de 5-0 en apenas cuatro minutos y medio, metiendo presión al bloque azulón con una defensa abierta y presionante. A pesar de las dificultades y las exclusiones finales, los vallisoletanos resistieron el último empuje local y, con la seguridad de su capitán César Pérez en portería, cerraron un triunfo importante sin sobresaltos en los instantes finales.
El conjunto pucelano dominó el encuentro controlando todas las fases del juego
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A pesar de la superioridad del cuadro pucelano las sevillanas no se rindieron y presentaron batalla en la segunda mitad del encuentro
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