Jesús Julio Carnero, alcalde de Valladolid, ha informado este viernes ante el requerimiento de ADIF, que ha cumplido cada uno de los puntos del convenio ferroviario de 2017, y que "aún no han recibido respuesta de la solicitud a la entidad pública ferroviaria de prorratear a lo largo de la vida del convenio el pago de los 11.075.000 euros" que debían abonar en marzo de 2024. En este sentido, deja claro que "no ha existido incumplimiento alguno de las obligaciones de mejora y ampliación del paso peatonal de San Isidro, Ariza y del proyecto de urbanización de la calle Salud", tal y cómo se recoge en la contestación al requerimiento de ADIF y ADIF-Alta Velocidad. 

"El Ayuntamiento de Valladolid no ha pedido ni va a pedir la disolución de la sociedad. Lo que pide es la modificación del convenio y que nos sentemos a hablar de la viabilidad del soterramiento y hacer un estudio informativo por parte de ADIF. No seré capaz de colegir lo que corresponda resolver a la presidencia de la comisión mixta de seguimiento", asegura el alcalde de Valladolid. 

El regidor, además, ha querido aclarar que "queremos que haya un diálogo con el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible para que se escuche la expresión de la voluntad mayoritaria de la ciudad de Valladolid y que habló claramente a favor de soterrar la vía del tren, que es viable desde el punto de vista económico, técnico y social". Ante la aparente intención de Óscar Puente de no facilitar el soterramiento de la vía ferroviaria en la capital pucelana, Carnero ha afirmado que "ni el alcalde de Valladolid, que está hablando, ni el ministro de Transportes son eternos en el cargo. La estación de tren de Valladolid le llevó más de 30 años ejecutarse. Por tanto, vamos a ir resolviendo las cosas de manera puntual, Valladolid merece algo distinto a los túneles del miedo y a Padre Claret".

"El Ayuntamiento de Valladolid va a seguir luchando por que la vía del tren esté soterrada, porque supone progreso social y económico. Desde el primer dejé claro que no íbamos a llevar a cabo ninguna acción que impidiera el desarrollo del convenio de integración, siempre y cuando las acciones fueran incompatibles con el soterramiento. Lo hemos demostrado con los sucesivos modificados en Panaderos, Labradores o con la realización del túnel de Padre Claret. No son tales los incumplimientos que señala ADIF en cada uno de los puntos. La posible controversia o discusión que pudiera haber corresponde dilucidarla a la comisión mixta de seguimiento del convenio. Así se lo hemos comunicado a ambos", añade.

También fue preguntado sobre las obligaciones de actuación de conexión rodada y peatonal de Ariza, el alcalde ha declarado que "si impide o no el soterramiento en un momento dado es lo que dirá si podemos dar paso o no a la actuación." En cuanto al Arco de Ladrillo, Jesús Julio aclara que "le dijimos a ADIF que desde un punto de vista técnico y circulatorio no es viable, y ha habido un reconocimiento técnico de ello. No podemos demoler Arco de Ladrillo sin tener resuelto el tema de la calle Daniel del Olmo"

Por último, sobre la adquisición de los nuevos autobuses, Carnero dice los siguiente: "Vamos a hacer las actuaciones correspondientes que nos permita llevar a cabo la compra de cinco autobuses por el importe de 2.100.000 euros de GNC, con lo cual seguimos contribuyendo a la descarbonización. Podríamos tener comprados esos autobuses antes con los 11 millones que tenemos retenidos. Creemos en el transporte urbano y en la movilidad sostenible que trata de mejorar la vida de todos los ciudadanos de Valladolid. Con estos autobuses, vamos a llegar al 55% de autobuses comprometidos con la descarbonización".