La oposición denuncia el tiempo "limitado" de sus intervenciones en el Pleno Extraordinario sobre el derrumbe de la Vera Cruz

La convocatoria del próximo Pleno Extraordinario del Ayuntamiento de Valladolid ha traído consigo un acalorado debate en los pasillos de la Casa Consistorial vallisoletana. El alcalde, Jesús Julio Carnero, limita el tiempo de intervención en la reunión que tendrá lugar esta semana sobre el derrumbe de la iglesia de la Vera Cruz.

La fecha, la hora y el tiempo de duración de la sesión plenaria han sido fijados por el primer edil y, a pesar de que se trata de un asunto de suma importancia, el político 'popular' ha decidido que el tema sea tratado como si fuera una moción de un Pleno ordinario más.

El Grupo Municipal Socialista considera "muy grave" para el funcionamiento democrático del Ayuntamiento de Valladolid que el alcalde haya limitado el tiempo de intervención de los grupos municipales a solo nueve minutos y ha denunciado que esta actitud evidenciaría la importancia que Carnero concede a un tema "tan relevante, como es el derrumbe de la cúpula de la Vera Cruz, iglesia del siglo XVI que es el epicentro de nuestra Semana Santa". 

"Se hurta a los ciudadanos un debate sosegado, con tiempo suficiente para explicar argumentos y también para que el equipo de gobierno PP-Vox asuma responsabilidades por su negligente gestión. La opinión pública tiene derecho a la información", subraya Pedro Herrero, portavoz del Grupo Municipal.

Hasta la fecha, se han celebrado dos plenos extraordinarios, también solicitados por el GMS. En el primero, dedicado al debate del soterramiento, el Grupo Municipal Socialista tuvo 52 minutos. En el segundo, sobre la dedicación de Carnero a la Alcaldía, el tiempo de intervención fue de 36 minutos. El próximo viernes, solo serán nueve minutos.

Herrero, explica que el Reglamento Orgánico del Ayuntamiento de Valladolid aprobado en 2019 por unanimidad de todos los grupos municipales (PSOE, PP, Ciudadanos, VTLP y Vox) precisa en diferentes artículos la responsabilidad del alcalde a la hora de convocar los plenos, manifestando con esas declaraciones su "inconformidad" con este asunto.

Por su parte, Rocío Anguita, portavoz del Grupo Municipal Valladolid Toma la Palabra (VTLP), ha expresado también su "preocupación" tras la reunión de la Junta de Portavoces de este lunes, 7 de octubre, donde se ha establecido la fecha para el próximo pleno extraordinario.

Este pleno, que tendrá lugar el próximo viernes, 11 de octubre,  a las 8:30 horas de la mañana, abordará la responsabilidad política por el derrumbe de la cúpula de la Iglesia de la Vera Cruz, pero lo hará bajo un formato que Anguita calificó de "inédito y preocupante".

 "Desde Valladolid Toma la Palabra mostramos nuestra enorme preocupación por la falta de debate y de diálogo político que tiene el equipo de gobierno municipal. Convocar un pleno extraordinario para tratar un tema de esta envergadura en un formato reducido, con apenas siete minutos de intervención y nueve minutos para el proponente, es algo que nunca había ocurrido en nuestro ayuntamiento", sentencia la política.

La portavoz ha señalado que este formato "limita" el debate en un asunto extraordinario que "exige mayor profundidad y reflexión". Además, ha criticado la "aparente falta de voluntad" del equipo de gobierno para avanzar en temas clave como la integración ferroviaria, poniendo de ejemplo la decisión del concejal Zarandona de asistir por videoconferencia a una reunión crucial en lugar de hacerlo de manera presencial en Madrid.

"Creemos que no es lo mismo una reunión presencial que una por videoconferencia. El equipo de gobierno parece no tener ganas de debatir ni de exponer sus argumentos políticos sobre las acciones que está tomando, lo que cercena el debate sobre el futuro de la ciudad", ha concluido la portavoz de VTLP.