Se cumplen cinco años de una pandemia en la que se vivieron momentos que quedarán para siempre en el recuerdo de los vallisoletanos
Más de 11.000 vallisoletanos viven aún sin ascensor
Esta situación es más crítica en los barrios más envejecidos de la ciudad como Rondilla, Cuatro de Marzo, Delicias o Santa Clara
La población envejece y con ello sus edificios. En Valladolid son más de 79.000 las personas que tienen más de 65 años, una edad en la que la movilidad comienza a estar reducida. Muchos de estos vallisoletanos se concentran en algunos de los barrios más envejecidos como son Rondilla, Cuatro de Marzo, Delicias o Santa Clara.
Los edificios en estas zonas de la ciudad suelen estar bastante envejecidos y carecen de servicios mu necesarios para la población más mayor como es el ascensor. En las décadas de los años 60 y 70 no existía aún una regulación que obligase a instalar ascensor en edificios que tuvieran menos de 14 metros, entorno a cuatro o cinco plantas.
Entonces no implicaba un problema, ahora esa población ha envejecido y su movilidad no es igual. Al carecer de ascensor muchas viviendas de la ciudad impiden una buena calidad de vida para sus habitantes. En la ciudad de Valladolid, según datos del INE, son 115.547 las viviendas de más de dos plantas. De las construidas antes del año 1971, carecen de accesibilidad 7.966 viviendas; y posteriores al 1990 no poseen ascensor 4.593.
Desglosados estos datos en bloques más bajos, de entre dos y nueve plantas, antes del 1971 sólo un 17% era accesible, entre los años 1971 y 1990 esa cifra se elevó hasta un 24%, y a partir del 1990 son un 70% las viviendas vallisoletanas que poseen ascensor para uan mejora de la calidad de vida de sus habitantes. En bloques de una mayor altitud, más de diez plantas, los datos varían. Anterior al 1971 un 83% de bloques son accesible, en las dos franjas temporales siguientes las cifras son muy elevadas con un 96% entre 1971 y 1990, y un 95% a partir de 1990.
Los vecinos de estos bloques viven cada día una odisea para acceder a sus hogares. Al tratarse de una población envejecida se tratan de personas muy vulnerables sin accesibilidad a sus viviendas. Cada día una persona mayor con dificultades de movilidad debe acceder a su vivienda a través de la escaleras, una situación que provoca que mucha veces estas personas apenas salgan de sus hogares por la imposibilidad de moverse con facilidad.
Según un Reglamento Municipal aprobado en 1977, se recoge la posibilidad de la construcción de elevadores residenciales en la vía pública si en el interior del edificio se carece de espacio. Un hecho, que también se recoge en la Ley de Ordenanza de Ascensores de 2011 en Valladolid. Son más de 100 las obras aprobadas por el Ayuntamiento de la ciudad desde que estos reglamentos se pusieron en marcha, facilitando así la vida de sus habitantes.
El jefe de Neumología, el jefe de Enfermería de Urgencias y la supervisora de Enfermería relatan lo que vivieron en primera línea hace cinco años
Tribuna Valladolid ha podido comprar los avances visibles en el interior del templo
Allí han analizado estrategias de detección y abordaje de dificultades en niños de 0 a 6 años