El 43,1 por ciento de los contribuyentes de la provincia de Valladolid que el año pasado realizó la declaración de la renta contribuyó con la financiación de la iglesia diocesana marcando la 'X'  para derivar el 0,7 por ciento de sus impuestos a favor de la institución religiosa.

La Agencia Tributaria registró, en 2022, más de 123.000 declaraciones a su favor, que generaron 4,5 millones de euros, aunque la Diócesis solo recibió 3,7 millones tras el reparto de la Conferencia Episcopal Española (CEE).

A nivel regional, Castilla y León destaca en colaboración, encontrándose la comunidad entre las cinco que más tachan esta casilla en toda España. Un 41.7% del total. Un porcentaje que es superior a la media nacional, que se situó en el 31,2 por ciento. 

Así se ha hecho saber en la presentación de los datos del ejercicio del año pasado tanto de la labor de la Iglesia de Valladolid como de Cáritas Diocesana, con motivo del inicio del plazo para presentación de la Declaración de la Renta de 2022.

Desde la institución han insistido en que "es necesario" que se marquen las cruces de colaboración, tanto con la Iglesia católica y como con los fines sociales en la declaración de la renta.

En la rueda de prensa de este martes, 11 de abril, han comparecido el vicario general del Arzobispado, Jesús Fernández Lubiano, el ecónomo, José María Conde, y el delegado de Cáritas Diocesana de Valladolid, José Colinas.

Desde la Archidiócesis de Valladolid y Cáritas han querido agradecer la generosidad de los fieles al sostenimiento de la Iglesia y los fines sociales, "permitiendo así el desarrollo de su misión".

La mayoría de esta recaudación va destinada al pago de nóminas de sacerdotes y religiosos en la provincia de Valladolid, además de a ayudar a la financiación de las obras que se vienen realizando durante el año en todas las parroquias.

Desde la sede del Arzobispado, ubicada en la calle San Juan de Dios, han destacado que "cada vez es mayor" el número de contribuyentes y que esta forma de participación ciudadana "es una decisión libre que no perjudica a nadie porque no se trata de un sobreimpuesto, si no que parte de lo recaudado se dedica a esos fines".

También se ha hecho público que todas las colectas han aumentado durante 2022. Y las subscripciones mensuales o anuales de donativos porque "los creyentes se han acostumbrado a esta nueva forma de colaboración".