La provincia de Valladolid se ha vuelto a encontrar con la nieve, tras la advertencia de la Delegación de Gobierno de Castilla y León y la incredulidad de sus habitantes que no están acostumbrados a este fenómeno meteorológico. 

La mañana de este jueves, 23 de febrero, comenzaba con una alerta naranja de que, a lo largo de la jornada, iba a protagonizar uno de los momentos del invierno. Aunque ya se prepara para la primavera, la nieve no quería despedirse del periodo invernal de 2023 sin que la provincia volviese a teñirse de blanco.

Más de un año después la nieve ha hecho acto de presencia en la capital vallisoletana y en la provincia. A las 10:30 de la mañana han empezado los primeros copos a cubrir con un manto blanco las calles de la ciudad. Como dato, la provincia ha sido la última en la cual ha llegado la nieve, por detrás de Salamanca, la cual ha llegado sobre las 10.00 horas.

Aunque el aviso estaba previsto hasta 14:00 horas de la tarde, se ha alargado hasta las 20:59, según fuentes consultadas porTribuna Valladolid.

El Ayuntamiento ha establecido un dispositivo en el que los servicios municipales continúan trabajando para repartir sal en puntos considerados "conflictivos" de la ciudad ante la nevada que ha caído desde primera hora. Afortunadamente, la situación actual es de "normalidad" en la circulación, tal y como ha explicado el concejal de Salud Pública y Seguridad Ciudadana, Alberto Palomino. De hecho, el Consistorio ha confirmado que se trata de un dispositivo similar al que se empleó en la borrasca 'Filomena'. Además, hay que señalar que el Ayuntamiento tiene 23 vehículos dispuestos (quitanieves, furgonetas esparcidoras de sal y palas) y 550 toneladas de fundentes almacenadas para prevenir los efectos de las heladas.

La Policía Municipal ha cerrado  el Campo Grande por precaución, debido al tiempo que se está registrando durante las últimas horas con nieve y frío. De hecho, esta clausura se lleva a cabo habitualmente cuando las conidicones del clima así lo aconsejan y exigen.

La nieve y el hielo han afectado a diferentes carreteras de toda Castilla y León, tal y como señalan desde la Delegación del Gobierno en la Comunidad con la colaboración de la Dirección General de Tráfico (DGT). Son tres los tramos donde la provincia vallisoletana se ve implicada. En los tres casos, se prohíbe adelantar a vehículos pesados, pero el nivel de servicio es verde, por lo que estaría lejos del uso obligatorio de cadenas o de las restricciones de velocidad siendo los 30 kilómetros/hora el máximo permitido. Como la situación en la provincia, de momento, no es tan alarmante, tan solo hay que tomar precauciones en la A-60 en el tramo entre Zaratán-Navabuena, en la A-6 entre Villa-Sanz y Cerecinos de Campos y la A-62 entre Cigales y Cañizal.