A la espera de ver qué ocurrirá en 2023, donde la Feria de Floclore y Gastronomía tendrá que buscarse nueva ubicación por la construcción de la Ciudad Deportiva del Real Valladolid, en esta edición de 2022 desde la Federación de Casas Regionales y Provinciales en Castilla y León se pretende darle un empujón con una nueva estructura que permita una mayor comodidad.

Para ello se ha proyectado una gran carpa de más de 6.000 metros cuadrados que cobije a los miles de visitantes de las inclemencias del tiempo, tanto del calor como la lluvia. Asimismo, alrededor de esta estructura que tiene 45 metros de boca (anchura) por 160 metros de cuerda (largura) se ubicarán las diferentes Casetas Regionales, que ofrecen las viandas más típicas de cada territorio.

Así lo ha adelantado, José Luis Bellido, presidente de la Federación de Casas Regionales y Provinciales en Castilla y León, quien asegura que están con el "papeleo". No obstante, hasta que no reciban el visto bueno del Colegio de Arquitectos no podrán poner en marcha su objetivo para este año. Barajan un plan B que es una estructura similar a la de la última Feria celebrada (2019), en la que se instalan carpas de más de 150 metros cuadrados para cada caseta, excepto la de Andalucía que normalmente cuenta con un espacio superior a los 600 metros cuadrados.

Asimismo, en esta ocasión la Feria contará con otra novedad: la instalación de la caseta de Baleares con lo que en total habrá 17 espacios participantes. Desde la Federación se confía que finalmente se pueda instalar la gran carpa, similar a la de Pingüinos, que le aportará comodidad y confort a los muchos visitantes que no quieren perderse una de las citas clásicas de las Fiestas de Valladolid.