El VRAC Quesos Entrepinares conquistó un valioso triunfo en Sevilla tras imponerse 21-28 al Labiana Real Ciencias Rugby Club en un encuentro vibrante, repleto de intensidad y emoción hasta el pitido final.

El choque, disputado en el Campo Juan Antonio Arenas Posadas a las 12:30 horas, arrancó con un fuerte impulso del equipo local. Apenas en el minuto 5, Jaime Camarero aprovechó un descuido defensivo para inaugurar el marcador con un ensayo, convertido por Gabriel Alejandro Roldán (7-0).

La reacción del VRAC no tardó en llegar. Tres minutos después, Baltazar Taibo interceptó un mal despeje sevillano y, tras una espectacular carrera de más de medio campo, sirvió el balón en bandeja para que Miguel Lainz posara el ensayo bajo palos. El propio Taibo ajustó la patada y puso el 7-7 en el electrónico.

El partido se convirtió en un constante toma y daca, con ambos equipos disputando cada centímetro del terreno de juego. En el minuto 28, Pablo Mateos adelantó a los vallisoletanos tras una gran asistencia de Taibo, quien además sumó dos puntos con la conversión (7-14). Sin embargo, el Real Ciencias reaccionó rápidamente con un ensayo de Alvar Gimeno en el 32', nuevamente transformado por Roldán, dejando el partido igualado a 14 al descanso.

La segunda mitad arrancó con el VRAC más decidido, imponiendo su solidez defensiva y aprovechando al máximo sus oportunidades. En el minuto 55, Pablo Miejimolle rompió el empate con un ensayo de potencia tras una jugada colectiva bien elaborada. Taibo, impecable con el pie, amplió la ventaja a 14-21.

El momento clave llegó en el minuto 67, cuando Mauro Perotti recuperó un balón vital en la veintidós propia y, con una transición fulgurante, propició la anotación de Fran del Pino. Taibo no falló y elevó la ventaja a 14-28.

A pesar del golpe, el Real Ciencias no se rindió y en el 71' recortó distancias con un ensayo de Vicente del Hoyo, convertido por Roldán (21-28). Los minutos finales fueron de máxima tensión, especialmente tras la expulsión temporal de Marc Sánchez, que dejó al VRAC con un hombre menos. Sin embargo, los vallisoletanos resistieron con una defensa férrea y lograron mantener su ventaja hasta el final.

Con el pitido definitivo, el VRAC celebró una victoria sufrida pero merecida, cimentada en su disciplina defensiva y la eficacia de su ataque. Un triunfo crucial en su camino por la División de Honor que refuerza su candidatura en la competición.