Un rally Valladolid-Dakar con combustible de juventud y solidaridad

Aventura y solidaridad a partes iguales para cuatro jóvenes vallisoletanos que entre el 8 y el 15 de febrero participarán en el Uniraid 2025, una curiosa prueba para estudiantes con coches antiguos, cargados con material escolar y productos higiénicos y sanitarios para repartir en aldeas de Marruecos. El trazado del raid de unos 2.500 kilómetros, con un recorrido similar al antiguo rally París-Dakar entre Tánger y Marrakech, se deberá realizar en turismos con más de 20 años -excluidos los 4x4- y sin hacer uso del GPS para orientarse. Todo un desafío para sortear todo tipo de desafíos que pueden deparar los caminos y las dunas del desierto del Sáhara. Pero la recompensa es grande al poder hacer una labor humanitaria con el reparto de ayuda, de la mano de la iniciativa 'Across Desert'.

Rodrigo García, Alejandro Garabito, Pablo de Antonio e Ignacio Moreno son los cuatro integrantes del equipo vallisoletano, que los que algunos ya han participado en otras actividades de voluntariado de la mano de la ONG Cooperación Internacional pero ahora dan un paso más y buscan mezclar la solidaridad con una experiencia de aventura con el rally por Marruecos. De momento, Ignacio reconoce a la Agencia Ical que la iniciativa, en la que llevan inmersos un año, ha sido una experiencia de vida para "buscarse la vida", tanto para la búsqueda de los coches, los contactos con empresas e instituciones para financiar los datos, la entrega de material y la logística de la carrera en sí.

Tenemos a los cuatro protagonistas pero no hay que olvidarse de los otros dos actores principales como son los vehículos, cuyos motores tendrán la 'responsabilidad' de llegar buen puerto para concluir la carrera. Se trata de un Peugeot 306 XSI, del año 1996, y un Ford Fiesta MK3, del 94. Es decir, los coches superan, con creces, la edad de los jóvenes, que nacieron entre los años 2002 y 2003. Todo un desafío intergeneracional entre lo humano y la máquina. El modelo de la marca del león fue entregado, de forma desinteresada, por un vecino de Reinosa (Santander) mientras que el otro utilitario fue comprado, por un módico precio, en un pueblo cerca de Medina de Rioseco (Valladolid).

A lo largo de ocho etapas, los jóvenes -junto a otro centenar de vehículos llegados de toda España- recorrerán Marruecos de norte a sur, tras embarcar los coches en Algeciras, sin ningún experiencia en este tipo de carreras pero con toda la ilusión del mundo. Son tres alumnos de la Universidad de Valladolid (Derecho, Ingeniería Informática e Ingeniería de Diseño) y otro más estudiante en la Escuela Superior de Diseño. Un centro que se ha encargado de diseñar y vinilar con adhesivos los automóviles seleccionados. También ha habido colaboraciones de empresas que han permitido pagar el coste de las inscripciones de los dos vehículos (3.000 euros) y otros gastos como la puesta a punto de los coches, aunque contaron con la ayuda del centro Cristo Rey. Pese a ello, aún buscan dinero para el combustible y otros gastos. Y hoy aprovecharon su presencia en la Plaza Mayor de Valladolid, con dos pequeñas carpas y la exposición de los dos coches, para dar a conocer la iniciativa a la ciudadanía y pedir su colaboración.

La participación en el Uniraid implica que cada vehículo lleve, como mínimo 40 kilos en material para repartir en Marruecos, aunque Pablo señala que intentarán llenar "lo máximo posible" los coches. "Si podemos llevar 80 kilos en cada uno, adelante", añade. El joven reconoce que el rally tiene su parte lúdica pero no se olvida de la causa benéfico por lo que hay que intentar ayudar "lo máximo".

Tras esta aventura solidaria, hay otro mensaje como transmitir la necesidad de ayudar, de convertirse en voluntario, algo que los vallisoletanos reflejan en sus redes sociales continuamente con imágenes y videos, tanto en Instagram, TikTok y Youtube: @across_desert. "Algunos ya estuvimos ayudando en la limpieza de las localidades de Valencia, afectados por la DANA, y demostramos que la juventud tiene vida y puede ayudar en cualquier voluntariado, ya sea con visitas a residencias de mayores o acudiendo a centros de personas con discapacidad en Marruecos, como hace la ONG Cooperación Internacional", señala. 

Algo en lo que esta mañana coincidió la concejala de Educación y Cultura del Ayuntamiento de Valladolid, Irene Carvajal, quien subrayó que la participación de los cuatro estudiantes en el rally solidario es una muestra de la implicación de la juventud de la ciudad en causas que merecen la pena, tal y como quedó demostrado también en la DANA. "Dejan las palabras a un lado y se ponen en marcha para hacer cosas por los demás", valoró. De ahí que Carvajal apuntara que el Consistorio y su área no dudó en ayudar a estos jóvenes cuando les plantearon el proyecto, con el envío de material de primera necesidad, sobre todo para los escolares.