El presunto narcotraficante Marek Dawid Legiec, de 32 años, uno de los 10 fugitivos que más buscaba, ha sido detenido por la Policía Nacional tras entregarse en una comisaría de Murcia.
Según declaró, lo hizo por la fuerte presión a la que se veía sometido, que limitaba prácticamente todos sus movimientos y hacía insostenible su situación desde su inclusión en la campaña que pedía la colaboración ciudadana para su localización, informa este viernes este cuerpo, que no detalla su nacionalidad, y publica EFE.
Contra él había una orden europea de detención y entrega emitida por Polonia por pertenencia a organización criminal y tráfico de drogas, que presuntamente lideraba, tenía ramificaciones en al menos España, ese país centroeuropeo y Alemania, y había realizado envíos de estupefacientes por más de un millón de euros.
En 2022, las autoridades polacas informaron de la posible presencia en España de quien tomaba grandes medidas de seguridad para no ser descubierto, con nombres ficticios y numerosos cambios de residencia, según las primeras indagaciones policiales españolas.
Agotaron las vías habituales de investigación hasta tener que llegar a pedir para su localización la colaboración ciudadana difundiendo en los medios de comunicación y las redes sociales de internet del cuerpo su imagen, su edad y peculiaridades físicas como tatuajes y un lunar.
Por otro lado, la Policía Nacional ha arrestado en Madrid a otro fugitivo, de cuya nacionalidad tampoco se informa, sobre el que pesaba una orden internacional de detención de Colombia tras huir de una condena de 33 años de cárcel por matar junto a otras dos personas en agosto pasado en Cali con arma blanca a una mujer, desmembrarla y ocultar sus partes en bolsas plásticas y maletas arrojadas a la carretera.