García-Gallardo invita a Mañueco a conocer la realidad de la migración en Delicias: "Mucha delincuencia"

El portavoz de Vox en las Cortes de Castilla y León, Juan García-Gallardo, animó al presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, a reunirse con el dirigente de la Asociación de Vecinos del Barrio de las Delicias, Luis Miguel Trapote, para conocer "la realidad" del aumento que, aseguró, tiene la migración ilegal y la delincuencia en esa zona de la ciudad vallisoletana.

Ese fue uno de los argumentos que esgrimió García-Gallardo, tras la Junta de Portavoces de las Cortes que ordenó el próximo pleno de la Cámara, para retar al Grupo Popular y a su presidente a aprobar la proposición no de ley sobre la inmigración ilegal que se recoge, de nuevo, en el orden del día, tras no debatirse en el anterior por la suspensión de la sesión debido al efecto de la DANA en Valencia.

El portavoz de Vox, que pidió también al resto de grupos que "se despojen de perjuicios partidistas" y voten a favor de su PNL, estableció "un agravio" entre españoles vulnerables que necesitan recursos e inmigrantes ilegales a los que algunas onegés "alojan en hoteles".

Aunque reconoció que en Castilla y León no existe "la presión migratoria" de otros territorios de España, pidió actuar ya para no llegar a una situación que pueda ser irreversible, por lo que plantean una serie de medidas en su iniciativa, entre ellas "la inmediata expulsión" de todos los inmigrantes ilegales que se encuentren en la Comunidad Autónoma.

Además de animar a Fernández Mañueco a conocer la realidad de las Delicias, extendió la misma invitación a los medios de comunicación, en un barrio donde las mafias "traen inmigrantes ilegales" y ha subido la delincuencia, en cuya denuncia se basó en las manifestaciones del presidente de este barrio y de la Policía Nacional sobre incidentes que han tenido que atender por "machetazos, agresiones o delitos de trafico de drogas". "Es una realidad", apostilló.

Como argumento, recordó el apartado del pacto de Gobierno de PP-Vox para luchar por la inmigración ilegal, motivo de ruptura del acuerdo por su incumplimiento. "Castilla y León es una comunidad solidaria", apuntó poco después el portavoz del Grupo Popular, Ricardo Gavilanes, que aseguró que la Junta no ha cambiado sus políticas de inmigración tras la salida de Vox.