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El UEMC Real Valladolid Baloncesto volvió a perder, esta vez en la Copa de España, alargando de esta forma la mala racha de resultados que arrastraba de la Primera FEB. De hecho, se enfrentaba a un Zamora que, en liga, arrojaba un balance totalmente diferente que tienen los blanquivioletas, ya que solo han perdido un encuentro de los cuatro disputados hasta ahora.
Se notaban las ganas del UEMC de revertir la situación y de certificar el pase a los cuartos de final de la Copa, donde lo había ganado todo. Era su último compromiso copero y no lo pudo sacar adelante, pese a dar una imagen que, por momentos, recordaba a lo que se había visto en pretemporada e, incluso, en Alicante, donde debutó a lo grande. Pisuerga, con una entrada previsible al ser un día de diario, disfrutó de los suyos, aunque espera que el viernes reinen, de una vez por todas, en liga..
El Pucela Basket entró al partido con ritmo. Su 16-8 de parcial manifestaba la superioridad inicial de los locales que, liderados por un gran Hoover, mantuvieron la ventaja, pese a la reacción de Zamora con un inspirado Buckingham que metía el miedo en el cuerpo a los aficionados a las primeras de cambio (24-21).
Los visitantes, que sabían que dependían de sí mismos para eliminar al Pucela Basket, bajaron la intensidad defensiva, algo que aprovecharon los de Lolo Encinas para poner tierra de por medio (38-27). A la buena actuación de Rozitis, al que poco se le pueden reprochar cosas, se sumó las aportaciones de un estelar Atencia y de Agustí Sans, que fue de más a menos en el partido.
La reanudación le sentó mejor al Zamora de Saulo Hernández, que se colocó a un punto del UEMC gracias a un parcial de 5-12. Los locales, obligados a despertar, reaccionaron y de qué manera. Bajo la batuta de Dani Manchón, los blanquivioletas empezaron a ampliar la ventaja para irse al último y definitivo cuarto 74-63 con triples, incluidos, de Atencia y Hoover, que se volvieron a entonar.
Los últimos diez minutos fueron, por completo, de Zamora que, al final, se mereció ganar el encuentro. Ese miedo a perder lastró al UEMC Pucela Basket que, tras hacer un gran tercer periodo, comenzó a fallar, lo que dio alas al Zamora que se empezaba a creer que podría clasificarse a la siguiente ronda. De hecho, tuvo en sus manos forzar la prórroga con 85-85 en el marcador, pero una mala decisión perjudicó a los de Saulo Hernández, que se llevaron a Zamora una victoria agridulce por no haber ganado de más de cinco puntos, que era su objetivo.
Por su parte, el Pucela Basket deberá cambiar el chip antes de afrontar el duelo del viernes ante Obradoiro, otro compromiso importante en liga, donde no conoce la victoria desde la primera jornada.
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