El Real Valladolid cerró un domingo perfecto que termina con castellanos colíderes tras esta jornada 37, después de superar 1-0 a la SD Huesca en un duelo muy propio de estas alturas de temporada, con mucho en juego, con mucha tensión, con alternancia de ocasiones. El gol de Meseguer, a balón parado, en el minuto 9 fue suficiente para atar tres puntos después de desplegar un buen número de virtudes defensivas.

Entró mucho mejor al partido el equipo local. Con un José Zorrilla cada vez más ilusionado, los primeros minutos fueron de control total con varias llegadas peligrosas que dibujaron los primeros '¡uys!'. La tuvo Moro, la pegó Escudero y, a la tercera, Meseguer de cabeza encontró el camino al rematar con calidad un centro medido de Escudero en una falta lateral. Con la ventaja los de Pezzolano siguieron mandando y las ocasiones llegaron con menos frecuencia pero con similar peligro. Moro generó, con su velocidad, un tres contra dos que solventó con un disparo potente, pero ligeramente alto, además de un disparo de Negredo tres minutos después, que también salió por encima del travesaño. La SD Huesca logró encontrarse sobre el verde y ganó metros, llegando aunque con timidez a la portería de un Jordi Masip que ya se mantiene imbatido 538 minutos consecutivos.

En la segunda mitad los nervios se cotizaron al alza. A punto de empezar mayo cada balón cuenta, cada carrera importa y cada oportunidad es oro, algo que equipo y afición saben de sobra. Por eso estos 45 minutos fueron de lucha, de no perder lo conseguido, de apretar, de achicar espacios. Y también de llegar al área rival, como la que fabricaron entre Monchu, Moro y Anuar para que el canterano lograse un córner después de que el portero tapase muy bien el pase de la muerte del extremo. También Masip intervino para despejar un balón muerto atrás, en el 58', y de nuevo Anuar la tuvo en una de las más claras de esta parte, una jugada veloz en la que se quedó en el mano a mano, pero la defensa recuperó rápido para impedir el tiro. 

Así se llegó al tiempo de descuento, seis minutos agónicos en los que los oscenses apretaron y se volcaron. Ahí, la defensa blanquivioleta volvió a demostrar su gran momento para salvar primero un balón muy peligroso tras un despeje forzado de Masip, gracias al buen hacer de Boyomo, y después Tárrega evitó otra opción rival para amarrar el triunfo.

Quedan cinco partidos para el final de fase regular de esta LaLiga Hypermotion 2023-24, pero este domingo el Real Valladolid duerme colíder con 64 puntos.