Los constantes retrasos en las obras del Clínico de Valladolid, adjudicadas en junio del 2022 por 24.362.850 euros, y que deberían estar listas en octubre del 2024, ha llevado a la Consejería de Sanidad a resolver el contrato con la empresa contratista, según han confirmado fuentes de este departamento.

Esa obra se adjudicó el 7 de junio de 2022 por valor de 24.362.850 euros y un plazo de ejecución de 26 meses que debían concluir el próximo octubre de 2024.

Fuentes de la Consejería han detallado a EFE que la administración regional no ha podido actuar antes por la Ley 9/2017 de contratación pública, que es estatal, que establece que la demora en el cumplimiento de los plazos por parte del contratista es causa de resolución del contrato cuando se supere un plazo superior a un tercio de la duración inicial del contrato.

La Consejería ha defendido que han actuado "lo rápido posible y tras exigir reiteradamente a la empresa contratista que cumpliera el contrato".

En rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, su portavoz y consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, ha reconocido que todas las administraciones tienen "un problema serio" en estos momentos en España derivado del impacto de la inflación, que afecta al coste de algunas obras planteadas antes del alza de los precios.

Se trata de obras, como es el caso del Clínico, adjudicadas por un importe que "la realidad demuestra que los contratistas no pueden llevar a cabo", con una ley que además "no permite una modificación del coste de rotación por encima del 20 por ciento", lo que esté haciendo que muchas obras se abandonen, ha analizado Carriedo.

En este caso, "el ritmo de ejecución nos pareció claramente insuficiente y no vimos voluntad en el contratista de concluir las obras, básicamente porque el coste de las mismas estaba siendo mucho mayor del que inicialmente determinó el proceso de adjudicación y sin perjuicio, lógicamente, de las sanciones o de la incautación de los avales correspondientes que pudiera proceder, se rescinde ese contrato para poder proceder cuanto antes a la adjudicación de una nuevo", ha añadido el portavoz de la Junta.

Ha incidido en que si se siguiera esperando y se mantuviera el ritmo de las obras "el proyecto tardaría muchísimo en poderse terminar", por lo que a la Consejería le ha parecido oportuno rescindir el contrato.

En cuanto a que se trata de una empresa que ya había dejado de ejecutar otras obras en León o Burgos, ha explicado que las expectativas sobre cómo puede actuar una contratista no son motivo para que no puedan concurrir en un proceso en el que además se tienen en cuenta otros elementos.