Empezaba el día con la sombra de los tristes acontecimientos de ayer sobrevolando el circuito. Sentido minuto de silencio para recordar a Dilano, y que mejor homenaje que una excelente carrera como la que nos brindaron los pilotos.

Salían todos con medios excepto el Nano, séptimo, que quería probar una estrategia diferente para paliar su falta de ritmo. Salía poleman Verstappen, que sorpresa, escoltado por los Ferrari de Charles y Carlos. Salían desde pitlane De Vries y Magnussen. Luces fuera y empieza el GP de Austria. Salieron bien los Ferrari acosando a Max al paso por la primera curva. Alonso a pesar de un compuesto más lento, se ponía quinto al pasar a Stroll y Norris, aunque el de Mclaren le devolvía la pasada a la salida de la curva 3. Tsunoda destrozaba el alerón delantero contra un Alpine y teníamos el primer safety car del día, para retirar la fibra de carbono sembrada por toda la curva 1. Todo esto en la primera vuelta.

Se reanudó la carrera en la vuelta 3 y Max se fue. Empezó entonces un tira y afloja entre los Ferrari, ante el evidente ritmo de Carlos que le estaba comiendo la tostada a Leclerc con el DRS. Le cortaron las alas por radio al madrileño, que aún así seguía pegado a su compañero. En la vuelta 15 y tras pasar por boxes, Hulkenberg perdía potencia y se acababa retirando, generando así el segundo safety car del día, aunque este fue virtual. Se tiraron todos a boxes para una parada casi gratis de forma incomprensible en los casos de Ferrari y Alonso aunque por razones muy distintas. Ferrari metió a los dos pilotos, hicieron una terrible parada con Leclerc, y  sentenciando a Carlos, que no pudo aprovechar el safety, y librándose el equipo de la polémica por no dejarles correr. Se quejó Sainz por radio, pero ya era tarde para él. La parada de Alonso no se entendió porque llevaba duros el asturiano y porque llegó casi al final del VSC.

A Carlos le jodieron en boxes lo que no podían negarle en la pista, porque hoy el madrileño era mejor que Leclerc. Salió quinto por detrás de Max, Leclerc, Pérez y Hamilton. El británico era sancionado con 5 segundos por límites de pista y Carlos era cuarto virtualmente, pero no sobre el terreno. Manos a la obra, y despachaba Carlos al británico con un impresionante adelantamiento por el exterior. Una vuelta más tarde y ante un Pérez con neumáticos viejos, otro genial adelantamiento para pasar al mexicano y volver a ser tercero. En ese mismo instante, Albon protagonizó el adelantamiento de más cojones del fin de semana contra Ocon. El sucio francés hecho al hombre de Williams a la hierba pero Alex ni se inmutó y sin soltar el acelerador mantuvo el coche en su sitio para ponerse decimoprimero, asomándose de esta forma a la zona de puntos. Los neumáticos de Pérez estaban en estado crítico, y sabedor de ello Hamilton quiso sacar provecho. La pelea duró 3 vueltas hasta que llamaron al mexicano a boxes. Paró Verstappen también que salió tercero tras los Ferrari. A Carlos lo despachó de un plumazo y se fue el campeón del mundo a por Leclerc.

Norris estaba protagonizando un genial fin de semana, y quería seguir haciéndolo. Iba como una bala el británico y viendo a Hamilton renqueante en cuanto a ritmo, adelantamiento en la curva 4 y era cuarto el hombre de Mclaren, en la vuelta 28. Pérez tenía que volver a remontar y con el ritmazo que llevaba no le iba a costar mucho. Había parado en la vuelta 26 y en la 35 y tras deshacerse de 5 pilotos, entre ellos Russell y Gasly ya era séptimo y perseguía a Fernando. En el momento en el que Pérez pasaba a Gasly en la vuelta 35, Verstappen hacía lo propio con Leclerc y recuperaba esa primera posición que nadie dudaba que se fuera a llevar. Pérez cazó y pasó a Alonso en la vuelta 42 ante la pasividad del asturiano que sabía que hoy esa no era su carrera. Volvieron a parar los pilotos, esta vez para montar el último juego de neumáticos, vuelta a la acción.

Salió Carlos por detrás de Norris al tener que cumplir 5 segundos de sanción por límites de pista. Adelantamiento por fuera y de vuelta a la tercera plaza, bravísimo Carlos.  Pararon los Red Bull y ni una décima por encima de 2.5 segundos. Cazó entonces Checo a Carlos y empezó el baile. Lo intento Checo por fuera, por dentro, por un lado por el otro y nada, Carlos aguantó y se la devolvió una y otra vez. Cuatro vueltas aguantó el madrileño al hombre de Red Bull que no solo nos hicieron disfrutar como enanos sino que le dieron a Leclerc un margen que le aseguraba la segunda plaza, algo que con el ritmo que venía imprimiendo Checo no estaba claro. Increible Carlos este fin de semana, perjudicado en favor de su compañero como es habitual en la casa Ferrari, se llevó una recompensa menor a la que sus esfuerzos merecían.

Ya no había tiempo para más, pero Max dijo que si, que era momento de otro de sus episodios de Bad Max. Con toda la soberbia que le caracteriza, exigió parar y montar neumático blando para ir a por la vuelta rápida al tener margen justo para una parada gratis. Lo mejor es que la vuelta rápida no la tenía otro que su compañero que había firmado una gran carrera y se la merecía, además así ya estaba en el equipo, pero no. Podéis decir lo que queráis, es el mejor, con el mejor coche y el equipo más profesional, pero como ser humano, deja mucho que desear. Se llevo la vuelta rápida quitándosela así a su compañero, pero también se llevó el rechazo de los amantes de este deporte, y desafió de manera innecesaria a su equipo. Me surge la siguiente pregunta: ¿Hasta cuando tragará Red Bull con las niñatadas del holandés?

Acabó ganando Verstappen, con Leclerc segundo, Pérez tercero, un gran Carlos cuarto, un fantástico Norris quinto y Alonso sexto en un GP que no era el suyo. Afianza más su liderato , si es que eso es posible, Max Verstappen. La pelea por la segunda plaza del mundial de constructores se intensifica con la irrupción de Ferrari y hay más ganas que nunca de la siguiente carrera, esta vez en Sílverstone, la catedral del automovilismo.