Según la Organización Mundial del Movimiento Scout hoy en día hay más de 57 millones de scouts y personas en todo el mundo y 172 organizaciones nacionales. Desde 1907 cuando Baden Powell fundó el primer grupo de Boys Scout hasta hoy en día donde cada vez son más los que se unen al movimiento. Se dividen en distintas categorías dependiendo de la edad, divididos desde los 6 hasta los 20 años (castores, lobatos, scouts, escultas, rovers o scouters). De normal suelen empezar cuando son pequeños, entre los seis y los once años pero, "siempre hay alguno más mayor que decide ser scout o monitor, pero no suele ser lo habitual", así lo confirmaba la monitoria y scout del grupo vallisoletano Acrux, Laura S.

También se unen con otros grupos de Castilla y León para hacer reuniones y actividades, en el caso del grupo Acrux es porque pertenecen a la Federación de Asociaciones de Scouts de España (ASDE), donde repartidos por toda la comunidad hay casi 20 grupos, y "siempre hay alguna excusa para juntarnos".

"La gente tiene una idea de película americana sobre lo que es en realidad ser scout", añadiendo que no venden "galletitas", ni llevan el típico uniforme que se ve en la televisión... "Solo somos un grupo de gente que unidos con una pañoleta en el cuello". Siendo esta algo distintivo scout, donde cada grupo tiene unos colores y la diseña como quieran, haciendo que sea lo que les distinga de otros grupos. En el caso del grupo Acrux, sus colores son rojos y blancos lo que representa al hielo y al fuego, mientras que en el grupo Pisuerga son azules y amarillos lo que representa el trigo de los campos de castilla y el rio. 

En verano todos los grupos hacen campamentos, donde van de ruta o marcha y al principio del año los monitores fijan unos objetivos que se van cumpliendo a lo largo de la ronda, asi lo comentaba la scout y también monitora Marta González. Mientras que dividen los grupos dependiendo de su edad para así poder adaptar lo que vayan a hacer. Asimismo la diferencia con cualquier otro campamento es hacer actividades más relacionadas con la naturaleza y que están juntos durante todo el año, siendo además, monitores volunatarios.  

¿Qué hay que hacer para ser scout?

Lo más característico que tienen los scouts es el contacto con la naturaleza y el sentimiento de grupo, asi lo confirmaban las dos monitoras. Para ser miembro lo primero ver si hay plaza en el grupo al que vas a entrar, formalizar la inscripción y pagar una serie de cuotas. Con ese dinero financian todas las actividades y materiales, ya que los trabajadores como Laura o Marta, son voluntarios, "no cobramos nada".

"Lo que hacemos es educar por la acción, con valores", añadía la monitora. Confirmando que su objetivo es que esos niños jueguen y se diviertan pero siempre con el trasfondo de ir con valores buenos, que aprendan sobre el respeto, la amistad, el compartir..., "es lo que el movimiento scout promueve e inculca".

Tanto Laura como Marta son scouts desde hace 13 años donde ahora están ejerciendo de monitoras. Las dos chicas empezaron cuando sus padres las metieron ya que escucharon que era bueno para hacer amigos y perder la vergüenza. Para muchos el ser scout es como una forma de vida pero Laura lo define como una forma de dirigirla. Confirmaba que, al ser ahora monitora, "vas viendo como ellos aprenden lo que un día me enseñaron a mí". A lo que Marta concluía que es una manera distinta de ver las cosas, "adquieres unos valores sin darte cuenta basados en el escultismo".