Los Carnavales están a la vuelta de la esquina, una época donde pequeños y mayores disfrutan disfrazándose, pero también se trata de un momento más en el que hay que tomar ciertas precauciones, especialmente con la salud de los ojos.

Muchos de los disfraces que se utilizan en estas fechas requieren de maquillaje o de lentillas que pueden tener algunas repercusiones en los ojos si no se utilizan de manera adecuada.

El delegado provincial de Valladolid del Colegio de Ópticos y Optometristas de Castilla y León, Carlos García Crespo, asegura que las lentillas que se venden en los establecimientos sanitarios cumplen con un "control sanitario rigoroso, lo que no quiere decir que sean o no aconsejables".

Para García Crespo, uno de los problemas de las lentillas cosméticas (las de ojo de gato, las azules, las del diablo, etc.), que se utilizan mucho en Carnavales, es que suelen utilizarlas menores de edad. En ocasiones, compran estos productos a través de medios "que no son los adecuados", o que muchas veces no han aprendido un proceso de adaptación. "Yo nunca vendo a nadie una lentilla cosmética si antes no me demuestra que sabe quitárselas y ponérselas", asegura.

En los establecimientos sanitarios, según el delegado del Colegio de Ópticos, son "reacios" a poner lentillas normales de corrección a menores de 16 años, "porque están en una edad en la que generan más grasa".

El ojo es un órgano sujeto a infecciones, y el mayor problema que encuentran los ópticos es el "no control" en la adaptación de quien compra unas lentillas para poderlas utilizar, de la forma que sea, tanto para un problema optométrico porque las necesita para ver, como para un tema estético porque las quiera para una fiesta de Carnavales.

Repercusiones de un mal uso de las lentillas

Los profesionales de la salud ocular se encargan de enseñar a utilizar las lentillas y a tener la higiene "pertinente" para que no se produzca conjuntivitis ni ningún otro tipo de patología ocular. Por esta razón, a la hora de comprar lentillas, la mejor recomendación es acudir a una óptica porque es donde tienen el sello de la Comunidad Económica Europea.

Además, con las lentillas se pueden producir úlceras si no se saben poner o quitar. "Hay una serie de factores que, si no están controlados de alguna forma o recomendadas por un sanitario, pueden tener sus problemas", advierte García, que exclama que el mayor problema se da a la hora de ponérselas y quitárselas, porque se está introduciendo un objeto extraño en el ojo que, si no se hace correctamente, puede producir un daño.

Carlos ha conocido el caso de algunos jóvenes que acuden a consulta porque no saben quitarse las lentillas, y han tenido que dormir con ellas durante toda la noche, lo que produce que se les introduzca entre el globo y el párpado.

Recomendaciones para cuidar la salud ocular

El delegado de Valladolid del Colegio de Ópticos y Optometristas aconseja que quien quiera utilizar las lentillas cosméticas que acuda a un establecimiento sanitario, "aunque solamente sea para un proceso de adaptación de aprender a ponérselas y quitárselas, y para recibir algunas pautas higiénico-sanitarias", relata.

Desde el Colegio de Ópticos insisten en que lo más importante antes de ponerse las lentillas es lavarse las manos, sin olvidar que las manos tocan el ojo. García Crespo recomienda "que siempre se haga desde un establecimiento óptico porque tiene el sello sanitario", que es donde se va a garantizar que el proceso de adaptación e higiénico sanitario para poderlas utilizar sea el correcto.

Cuando el Colegio de Ópticos se entera de que se venden lentillas, sea del tipo que sean, en cualquier otro establecimiento que no sea sanitario, automáticamente se tramita una denuncia.