Pepe Viyuela clausura Olmedo Clásico con 'Tartufo': "Un buen chiste puede tumbar a un gobierno"

El cómico y actor Pepe Viyuela bajará este domingo, 31 de julio, el telón a la XVI edición del Festival de Teatro Clásico en la Villa del Caballero, el Olmedo Clásico, con su interpretación de 'Tartufo', en la que reivindica el poder del humor como transformador social, algo que, defiende, Molière comprendía y utilizaba a la perfección.

"El humor es una herramienta muy poderosa y el poder lo sabe, por eso siempre lo intenta controlar", ha explicado Viyuela en una entrevista concedida a Europa Press en la que afirma que "un buen chiste tiene la capacidad de llegar a tumbar a un gobierno".

El actor apunta que a la hora de transmitir un mensaje, la risa "es una forma muy amable de llegar" y la gente "admira muchísimo la inteligencia y a quien tiene gracia", hasta el punto de usar ese término, más allá del humor, para referirse a aquellos "tocados por algún don divino".

En el caso de la comedia, se trata de "la capacidad para hacer reír y tener ingenio", algo que en el poder "es muy temido" y que Molière, de cuyo nacimiento se cumplen cuatro siglos este año, "lo disfrutaba a raudales".

"Se había dado cuenta perfectamente de que a través del humor podía ser muchísimo más cáustico, más eficaz en sus críticas y tener un aguijón más afilado", recalca Viyuela, quien se subirá a las tablas de la Corrala de Palacio del Caballero de la vallisoletana villa de Olmedo este domingo a las 23.00 horas para poner fin a diez días de festival de teatro clásico.

El intérprete ha incidido en que "una broma o un chiste bien traído molesta más que una crítica violenta", lo que explica que "enseguida intentan ponerle coto". Frente a ello, reivindica su profesión de payaso en contraposición a la "seriedad impuesta" que "se pide todo el tiempo" y que le resulta "absolutamente ridícula".

"Por eso la risa se asocia con lo demoníaco o lo maligno. Si te ríes de lo más sagrado, del orden establecido, eres un revolucionario", enfatiza Viyuela, quien defiende el humor como "el antídoto contra el miedo".

ESTÉTICA CONTEMPORÁNEA

Viyuela estará acompañado en el escenario por un elenco que completan Paco Déniz, Silvia Espigado, Germán Torres, María Rivera, Estíbaliz Racionero, Javier Mira y Jorge Machín en una producción de la compañía Focus en la que el director Ernesto Caballero lleva la obra a una estética contemporánea para subrayar su vigencia.

Caballero ha apostado para esta versión por la traducción del texto al español que realizó el escritor afrancesado José Marchena (el Abate Marchena) en el siglo XIX, pero llevada a un presente que demuestra, a juicio de Viyuela, que Molière "sigue funcionando con vaqueros y camisa".

Así, 400 años después de ver la luz, los temas abordados por el dramaturgo francés en 'Tartufo' y otras comedias reflejan "una actualidad muy palpitante que hace parecer que fueron escritas "para hoy".

Este montaje con el que Viyuela y el resto del elenco está viajando por toda la geografía española es el primer papel que interpreta en una obra del dramaturgo francés, un reto que ha afrontado "desde el juego y la diversión" a la hora de construir su personaje, implicando a su cuerpo a través de la gestualidad, pero "bebiendo siempre del texto porque es donde está todo".

Precisamente el actor constata la atemporalidad de ese texto con sólo echar un vistazo a la actualidad y observar los paralelismos entre muchos personajes de hoy que le han servido de inspiración y el hipócrita y estafador Tartufo creado por Molière.

"Yo creo que nadie se libra. Nadie escapa a la falsedad, a la mentira en un momento determinado, a la hipocresía. Forma parte de nuestro ADN, pero es cierto que luego hay gente que lo tiene muchísimo más desarrollado y esos son los peligrosos. A esos es a los que hay que detectar, a los que de pronto sabemos que son capaces de cualquier cosa para conseguir lo que quieren", advierte el cómico, que alerta de que actualmente esas personas tienen a su alcance "instrumentos muy valiosos" para lograr sus fines.

Entre estos instrumentos, Pepe Viyuela incluye las redes sociales, que permiten a "todo aquel que sepa manejarlas" convertir "de la noche a la mañana" una mentira "en una aparente verdad" y "hacer de un bulo el motivo por el cual todo un país se revolucione o se conmueva o se enerve".

EL EJEMPLO DE DONALD TRUMP

Como ejemplo de esto, el actor cita al expresidente de Estados Unidos Donald Trump, quien "supo utilizar esa capacidad para llegar a tanta gente". "Para confundirnos, mentirnos, engañarnos y llegar nada menos que a la Presidencia de uno de los países más poderosos de la Tierra", ha apostillado.

Aunque subraya que "es imposible" mantenerse al margen de la política, en su caso apuesta por hacerlo a través del trabajo con asociaciones y ONG, o mediante la difusión de sus opiniones en artículos, pero descarta dedicarse a ella de forma activa bajo unas siglas. "Hay que tener vocación y capacidad de sacrificio para ser un buen político y yo no tengo ni una cosa ni otra. Estoy bien donde estoy", ha zanjado.

La obra con la que Viyuela visitará Olmedo este domingo muestra a un burgués, Orgón, que ha caído bajo la influencia de Tartufo, un falso devoto que persigue apropiarse de sus bienes, para lo que exagera la devoción hasta convertirse en el director espiritual de su víctima. No contento con ello, el protagonista, un "arquetipo del hipócrita" según el actor que lo interpreta, pretende también desposar a la hija de Orgón y seducir a un tiempo a la segunda esposa de éste, Elmira, mucho más joven que su marido.

Una vez desenmascarado, tratará incluso de aprovecharse de unas donaciones que Orgón le transmitió para echarlo de su propia casa, un aldabonazo de Molière frente a quienes se enmascaran con ciertos valores nobles en pos de su beneficio propio.